Situación Perú. Cuarto trimestre 2020

Tras el impacto de las medidas para contener el COVID-19, la actividad se viene recuperando mejor a lo esperado, aunque la normalización pierde impulso. Estimamos que el PIB retrocederá -13% en 2020 y que el próximo año habrá un rebote de 10%, tras las elecciones generales y la aparición de una vacuna o tratamiento viable.

Puntos clave

• Puntos clave:
• La gradual flexibilización de las medidas de aislamiento que se implementaron desde marzo para contener la propagación del virus ha favorecido que la actividad económica se vaya normalizando. Así, la contracción interanual del PIB pasó de 40% en abril a poco menos de 10% en agosto. Esta normalización, sin embargo, ha perdido algo de impulso.
• Hacia adelante prevemos un entorno de debilidad del gasto que realiza el sector privado. Del lado de las familias, por el deterioro del mercado laboral; del lado de las empresas, por la mayor cautela para invertir. En este contexto, estimamos que el PIB retrocederá 13% en 2020, pero que rebotará 10% el próximo.
• Por el lado de la política fiscal, la siguiente administración enfrentará el reto de elevar los ingresos tributarios para de esa manera estabilizar la deuda pública (como % del PIB). Asumiendo que se logra implementar un proceso creíble de consolidación fiscal y con ello se materializan influjos de capitales, así como una mejora del superávit comercial, el PEN se fortalecerá en 2021.
• El Banco Central mantendrá una posición de política monetaria fuertemente expansiva, con una tasa de interés de referencia que permanecerá en 0,25% hasta 2022, en un entorno sin presiones de demanda. No se descarta que, en caso sea necesario, se amplíe el estímulo monetario con medidas de política monetaria no convencionales.
• El balance de riesgos sobre las previsiones de actividad económica es alcista para 2020 y neutral para 2021.

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