España | Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia: hacer de la necesidad virtud

Tras un impacto del Plan en 2021 por debajo de lo esperado inicialmente, el énfasis debe recaer ahora en agilizar y acelerar su ejecución, y aprovecharlo para transformar nuestra economía, además de para invertir bien en buenos proyectos que sirvan para aumentar el empleo, su calidad y su productividad.

Puntos clave

• Puntos clave:
• Pese a las expectativas generadas a finales de 2020, la ejecución del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) en 2021 ha sido lenta en términos de su impacto en la contabilidad nacional.
• De acuerdo con la información del II Informe de Situación del Plan de Recuperación del pasado mes de abril, el gasto comprometido alcanzó unos 21.000 millones en 2021 y unos 4.500 en el primer trimestre del año.
• Para 2022, en BBVA Research esperamos una ejecución en términos de contabilidad nacional que podría alcanzar los 15.000 millones, que se aceleraría en 2023 y 2024 hasta alcanzar los 20.000. Estas previsiones dejan entrever un retraso de al menos un año respecto a las perspectivas de finales de 2020 y a un aplanamiento del proceso de ejecución de los fondos europeos.
• El riesgo en los próximos trimestres es que su ejecución se vea sometida a cuellos de botella, demoras en suministros y componentes, o restricciones de empleo con las capacidades necesarias, lo que daría lugar a mayores presiones inflacionistas y a un aumento de la demanda de importaciones.
• Otra incertidumbre tiene que ver con los efectos de los fondos europeos y de las reformas estructurales comprometidas para sus desembolsos sobre el crecimiento potencial del PIB y sobre la tasa de desempleo estructural.

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